dimecres, 10 de febrer del 2010

Amb el papa...



...A la fi del món.

2 comentaris:

Anònim ha dit...

Lástima no tener constancia de esos momentos de paz y equilibrio que nos han dado nuestros padres cuando éramos indefensos.
Padrí

Vero ha dit...

He aquí el espíritu del blog, tú lo has dicho. el consuelo es la certeza de saber que, aunque no tengas constancia de ellos, los ha habido.